Hola cariño, soy papá
Dentro de mí hay dos Marios
Uno que habla
Y otro que presta atención y juzga
Me costó mucho darme cuenta que casi todo lo que decía no era verdad
Ojo, tenía mis motivos
Quería ganar en discusiones
Obtener estatus
Impresionar a la gente
Conseguir lo que quería
Utilizaba el lenguaje para moldear la realidad
Para encaminarla hacia donde pensaba que debía dirigirse
Hasta que me di cuenta que, al hacerlo, me convertía en un farsante
A partir de ese momento hice caso al otro Mario
Intenté decir solo lo que mi voz interior no se opondría
Empecé a intentar decir la verdad
O, al menos, a no mentir
¿No sabes qué decir?
Di la verdad
Te hará libre
Aunque, al principio, te sacará de quicio
Te quiero hijo. Por siempre.