El texto dentro de este bloque mantendrá su espaciado original al publicarse
Hola cariño, soy papá Ten objetivos. No porque sea moda. Ni porque suene ambicioso. Sino porque, si no los tienes, estarás a merced de lo que te pase. Un mal día te tumba. Una buena racha te distrae. Una crítica te frena. Un halago te acomoda. Sin dirección, todo te afecta más. Todo te mueve. Todo te arrastra. Con objetivos, en cambio, no se trata de ir rígido, sino de ir con propósito. Sabes por qué haces lo que haces. Y eso te protege. De las dudas, de los cambios, de los días flojos. No hace falta que lo sepas todo. Solo el siguiente paso. Pero que sea tuyo. Elegido. No impuesto por la vida, ni por otros. Porque quien no tiene rumbo… acaba en cualquier parte. Y luego se pregunta por qué. Te quiero hijo. Por siempre.