Hola cariño, soy papá
Hoy te quiero hablar de una excusa que nos ponemos para no hacer lo que toca hacer
Y es tan sutil que a mí me ha costado muchos años darme cuenta que es una excusa
Por si te sirve
Me encanta ayudar a los demás
Es como un subidón
Alguien viene
Te cuenta su problema
Y te falta tiempo para saltar a ayudar
Te ofreces
Te desvelas
Haces todo lo posible
Y, no me malinterpretes
Que esto está genial
¿pero sabes qué me pasaba?
¿sabes cuando tienes esa decisión que tomar?
¿o eso que sabes que tienes que hacer pero que te cuesta la vida ponerte?
Pues que, estando en esa situación, a la mínima que veía la oportunidad saltba a ayudar a alguien
Porque me era muy dulce pensar
Sí, sí, sé que tengo que tomar esa decisión, y me encantaría tomarla ya mismo pero es que justo justo estoy ayudando a tal con cual
Si yo lo haría pero claro, no voy a dejar en la estacada a mi amigo
Ese era mi pensamiento mental
Y te lo digo no para que no te ofrezcas a ayudar
Sino para que no lo uses de excusa para no trabajar en ti
Te quiero hijo. Por siempre.