Hola cariño, soy papá
El otro día me dí cuenta de algo muy curioso escuchando cuando hablan niños entre sí que no ocurre cuando hablamos los “adultos”
Y te lo cuento porque te puede ayudar cuando vayas a tener en cuenta la opinión de alguien sobre algo que no entiendes
Mira
Lo que sucede cuando los niños hablan entre sí
Hablo de niños de 4 a 6 años
Es que uno habla
Cuenta lo que sabe
Y se calla
Y fin
El caso es que, cuando eres adulto, ya no sucede eso
En algún momento queremos vislumbrar diciendo tonterías
Y hablamos de cosas que no entendemos
O complicamos cosas que son realmente sencillas
El caso es
¿por qué?
¿por qué esa obsesión por complicar las cosas?
Pues principalmente porque es muy complicado que alguien distinga simplicidad de ignorancia
Es decir
Si tú dices algo
Que es tremendamente simple
Es probable que te tomen por ignorante
La complejidad da una falsa sensación de seguridad
Una falsa sensación de control
¿y sabes por qué?
Porque si digo cosas raras
De un tema que tú no controlas
Te es muy complicado hacerte una idea de mis conocimientos reales
Tienes la sensación de que sé más que tú
Pero puede ser un poco más o muchísimo más
¿y sabes qué sucede en ese momento?
Que tu tendencia natural es a tomar mis palabras
Mis consejos
Al pie de la letra
Y eso es peligroso
Tanto para el que habla
Como para el que escucha
Te quiero hijo. Por siempre.