Hola cariño, soy papá
Hoy te traigo una historia sobre comparaciones e inseguridades
Por si te sirve
Había una vez, una pequeña luciérnaga que solo salía de día
Y solo salía de día porque le daba vergüenza salir de noche
¿cómo iba a salir de noche con su pequeña luz cuando hay otras luces como la luna y las estrellas?
Lo que la luciérnaga desconocía era que no siempre la luz brilla
Y su luz, ni siquiera es propia
Es prestada
Muchas veces no hacemos cosas por el qué dirán
O por compararnos con la parte más brillante de la luna
Cuando la mayor parte de tiempo es más oscura que brillante
Y ni siquiera lo que brilla es suyo propio
Te quiero hijo. Por siempre.