Hola cariño, soy papá
Hoy te quiero contar (otra) historia
Una historia que te ayudará a entender qué necesita toda buena historia
“Érase una vez un sabio que vivía en un bosque al lado de un pueblo.
Había hecho voto de silencio y era muy querido por los habitantes del pueblo.
Todos los días se reunía gente para verle y preguntarle por una palabra
Una sola palabra
Pero él nunca decía nada
Los días fueron pasando
Los meses fueron pasando
Y la historia de este sabio se fue haciendo mayor y mayor
Hasta que un día, mucha gente picada por la curiosidad se reunió allí
Había más de 200 personas
Y solo pedían una palabra
De repente, el sabio se levantó
Señaló al bosque y dijo
Fuego
Y el bosque ardió
Bueno
Yo la primera vez que la escuché me quede un poco en plan meh
Que es lo que suele pasar cuando te quedas en la parte superficial de las cosas
Luego me lo explicaron y me gustó más
Toda buena historia sucede en un tiempo determinado (érase una vez)
Tiene un protagonista (el sabio)
Y un escenario (el bosque)
Para que sea interesante tiene que haber 1 problema y un conflicto (voto de silencio y pedir una palabra)
Luego generar clímax o expectativas o intriga (se iba haciendo más famoso y se reunió muchísima gente)
Y por último una resolución que debe hacerte arder la cabeza (fuego!)
Fíjate en las historias que ves
Y verás que las buenas cumplen con estas fases
Te quiero hijo. Por siempre.