Hola cariño, soy papá
Hace tiempo, unos científicos de esos que hacen cosas de científicos pusieron dos tarros de cristal en un puesto en un centro comercial.
Un tarro estaba hasta arriba de galletas.
Al otro le quedaban 10 o así.
A la gente que se acercaba les decian que estaban probando su nueva galleta y les dieron a probar una galleta de cada tarro.
Una galleta del tarro lleno
Y otra galleta del tarro casi vacío
El 95% dijo que estaban mejor las del tarro vacío
Como ya habrás podido adivinar, las galletas eran las mismas.
Bien.
Esto es así y siempre lo será, porque para nosotros, si de algo hay menos, es por algo.
Es decir.
Lo vemos como más valioso.
Más escaso, más valioso.
Simple.
Y nos condicionamos.
Te quiero hijo. Por siempre.