Hola cariño, soy papá
Hoy te traigo una historia que, nos guste o no, alguna vez nos ha pasado o pasará, por si te sirve.
Hace mucho tiempo, en un pequeño poblado, vivía un maestro muy famoso con sus discípulos
Un día, una joven se quedó embarazada pero no quería revelar el nombre del padre, hasta que, tras mucho insistir, dijo que era del maestro.
El día que el bebé nació, el padre de la joven cogió al bebé y fue a ver al maestro y le dijo:
- Parece ser que este hijo es tuyo
- ¿ah sí? Contestó el maestro cogiéndolo
A partir de ese día, el maestro iba a todos lados con el bebé. Muchos de sus discípulos lo abandonaron y el maestro iba por las casas pidiendo leche para el bebé hasta que la madre, sin poder aguantar más, reveló el nombre real del padre. Fue a ver al maestro y tras rogarle perdón le pidió que le devolviese al bebé.
El maestro se lo devolvió.
Y es que, a veces, la liamos y, lo que es peor, metemos en un marrón a alguien más que no tenía que ver nada.
Entonces, cuando la líes, toma responsabilidad y compensa, porque la conciencia te va a reconcomer por dentro contínuamente.
Y si te la están liando, ten presente la compasión y el perdón.
Te quiero hijo. Por siempre.