El hombre que corría con ira

Hola cariño, soy papá

Hoy te voy a contar una historia para cuando te enfades

Más bien para cuando se te pase el enfado

Para que la tengas en cuenta

Un señor fue a visitar al sabio del pueblo

Este señor era bien conocido por sus arrebatos de ira y buscaba una forma de no tenerlos

El sabio le dijo que, la mejor forma de entender el problema era que cuando se enfadase viniese a verle y así ver los síntomas

El señor accedió y la próxima vez que se enfadó fue a ver al sabio

Cuando llegó ya se le había pasado, así que el sabio le dijo, bueno, la próxima vez corre más

Al siguiente enfado, el hombre salió corriendo a ver al sabio, pero al llegar se le había pasado

El sabio le dijo que sin verlo enfadado, no le podía ayudar

Al siguiente enfado, el hombre fue cabalgando a ver al sabio

Y, al llegar, ya se le había pasado

No importa lo rápido que fuese, cuando llegaba ya se le había pasado

El sabio le dijo

Amigo mío, la ira no eres tú

La ira viene y la ira se marcha

Lo que tienes que hacer es aprender a no identificarte con ella

Las emociones, como la ira, vienen y van.

Lo que ahora te parece un mundo o inaceptable, en un rato te dará igual

Está de paso

Mira tus reacciones

Mira los síntomas

Y busca una forma de manejarlos

Te quiero hijo. Por siempre.

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