Hola cariño, soy papá
Hoy te quiero contar una reflexión que me ha costado estar desilusionado muchos días, por si te sirve de algo.
Pero antes, un chiste que te ayudará a entenderla.
Era una viñeta
En ella se veían a dos señoras mayores tomando el café frente a una ventana y, a lo lejos se veía un monstruo gigantesco destruyendo edificios mientras una le decía a la otra:” sí, ya sé que es un monstruo enorme y da miedo, pero a lo mejor solo quiere ser nuestro amigo”
El caso es que, conforme vayas madurando como persona
Y obteniendo paz, paciencia, amor, compasión
Si no eres consciente de que hay dos estados
El interno y el externo
Te vas a sentir como que todo el mundo te toma por tonto
¿Sabes esa expresión que de tan bueno era tonto?
Pues eso te va a pasar
Y cuando te pasa eso perderás el ánimo
Dirás cosas que el mundo no merece la pena
Cosas así
¿Sabes lo bueno?
Que no es que el mundo sea lo peor
Es que tú no te estás relacionando bien con él
El que la está liando eres tú
Y eso es muy bueno
Porque significa que lo puedes cambiar
Que tiene solución
Te lo explico con un ejemplo
Cuando te pase algo, o cuando interactúes con alguien, piensa en la situación
Piensa en las personas que hay implicadas
En qué dicen
En qué necesitan
Y entonces elaboras un plan de acción
Es decir
Tú, internamente, estás tranquilo, con el corazón abierto
Pero si la situación lo requiere
A lo mejor le tienes que estar dando una patada en el culo
O llamando a la policía
O inmovilizarlo
O denunciarlo
O lo que sea
Pero tú, por dentro, tranquilo y dispuesto a perdonar y a amar
Pero a lo mejor tienes que dejar de hablar a esa persona hasta que se dé cuenta del daño que te ha hecho
Pero tú por dentro tranquilo
O echarle la bronca
Pero tú por dentro con tu paz interior
Así que, cuando piensas que se están aprovechando de ti
Normalmente es porque no estás actuando como la situación lo requiere
Te quiero hijo. Por siempre.