Toda la vida entendiendo mal el miedo

Hola cariño, soy papá

Hoy te quiero hablar del miedo

Y de una cosa que me he dado cuenta cuando lo siento

Por si te sirve

Y ojo

No hablo del miedo miedo

Es decir

Que si viene hacia ti un toro por la calle

Pues claro que vas a cagar encima

Tú, yo y cualquier persona

No

No te quiero hablar de ese tipo de miedo

Te quiero hablar del otro

Del que te sale cuando quieres hacer algo y te echas para atrás

De cuando vas a decirle algo a alguien y te callas

De cuando hay que hacer algo y te escabulles

De ese miedo

Durante muchísimo tiempo he considerado mi miedo como un factor limitante a conseguir lo que quisiese

Es decir

Lo usaba de escudo

Como si fuese algo externo a mí

Como si fuese algo tipo: hey, que yo quiero, pero es que mira que excusa tan buena y racional se me acabo de ocurrir

Que no era yo, era mi miedo

Bien

Hasta que un día oí esta frase:

Los miedos no te limitan, te marcan el camino

Esta frase cambió la forma que me relacionaba con mis miedos

ya no eran una barrera

Algo externo a mí

Ahora son una señal

Una indicación que me dice: hey, que es por aquí

Y sobre esto tendrás que reflexionar mucho

Porque hijo, tus miedos te van a acompañar toda tu vida

Toda tu vida

Y eso, es mucho tiempo

Te quiero hijo. Por siempre.

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